Por Héctor Titito Rosa, Prensa FBAPR

Con apenas un día de descanso, el estelar lanzador zurdo Miguel Martínez pidió la bola el pasado domingo y entró en relevo para guiar a los Arenosos de Camuy al triunfo que le aseguró un espacio en la serie final de la sección Norte del Béisbol Superior Doble A.

Martínez acumuló 209 lanzamientos durante todo el fin de semana, una hazaña pocas veces vista en las últimas décadas de la pelota federativa.

La novena camuyana enfrentaba un escenario complicado.  Luego de tener contra la pared 3-1 a los Montañeses de Utuado, la serie semifinal seccional se empató, lo que obligó a celebrar un juego decisivo en el estadio Juan "Cheo" López, de Camuy.

El pasado viernes,  subió a la loma y perdió con pizarra 10-7, siendo su primera derrota del año después de ocho triunfos al hilo.  Realizó 106 lanzamientos en seis y un tercio de episodios trabajados, con nueve carreras permitidas.  Le propinaron siete hits y ponchó once contrincantes.

"Fuimos el viernes con la mentalidad de ganar y no se pudo. Utuado reaccionó, sabemos que Utuado es un equipo de serie, remontaron y la serie se puso 3-3.  Ayer (domingo) era de vida o muerte, no había mañana y nosotros queríamos ganar, nos unimos como equipo y no nos quitamos", destacó Martínez, quien ha defendido los colores de los Arenosos durante tres temporadas.

En la jornada sabatina, Utuado defendió su casa y apabulló 13-3 a Camuy para igualar la semifinal seccional. Fueron 23 carreras en total, marcadas por los Montañeses en dos días, frente a los lanzadores de los Arenosos.

"Cuando perdimos el viernes yo le dije (al dirigente, Tony Valentín) que estaba ready para relevar una o dos entradas el mismo sábado si estábamos ganando, pero esa gente nos dio una catimba", contó el lanzador, residente de Carolina.

En el séptimo juego, los utuadeños continuaron la producción y abrieron con dos carreras, para asumir la delantera desde la misma primera entrada.  Entonces, Martínez decidió ir al 'bullpen' a calentar y al poco tiempo, el dirigente Tony Valentín le hizo el llamado a entrar en relevo con dos outs, en sustitución del derecho Tomás Rodríguez.

Luego de conseguir el tercer out del primer episodio, Martínez cubrió el resto del desafío, con 103 lanzamientos.  Dio paso a cuatro incogibles, con tres carreras.  Abanicó cinco contrincantes y apenas otorgó un boleto.

Los Arenosos ganaron el partido con sencillo del emergente Carlos Vega en la parte baja de la novena entrada después de un doblete de Miguel López para dejar en el terreno a los Montañeses con pizarra 6-5.

"El equipo sacó corazón, ellos nos anotaron más de veinte carreras en dos juegos y estábamos un poquito pensativos, pasamos la página y fue un trabajo de todo un equipo, no de una sola persona... se hizo de corazón", sostuvo. 

Al concluir el desafío, Martínez lloró de emoción y recibió el caluroso respaldo de la fanaticada camuyana. "Fue algo precioso.  La reacción de la gente ha sido grande, muchos me han dicho que veían esto en los tiempos de antes en la Doble A", expresó.

"La meta principal es ganar el campeonato de Puerto Rico y para eso hay que ganarle a los mejores equipos. No había mañana, había que ganar si queríamos seguir con esa meta", añadió.

Martínez, de 33 años, se prepara a diario para ir al montículo y lograr victorias para los Arenosos.  Su entrenamiento se extiende por casi cuatro horas, todos los días de la semana.

"Desde temprana edad en mi carrera de béisbol sabía que si quería durar en este deporte tenía que ejercitarme.  Soy bien responsable con eso y me gusta prepararme para cuando llegue el fin de semana", aseguró el lanzador con experiencia a nivel profesional.

De cara a la serie final del Norte versus los Titanes de Florida, dijo estar listo para la encomienda que le delegue Valentín.  

"Yo nunca digo que no, obviamente estamos en la final de la sección, con un rival de respeto.  Ellos (Florida) llegaron primeros en la sección, va a ser otra serie bien fuerte y estamos 'ready' para lo que nos necesiten", puntualizó.